‘Mundo demonio y carne’ – Blanes

"Camarero" Barradas

Uruguay es un país que cuenta con una importante tradición de pintores. Existen muchos de renombre internacional y fama alcanzada, generalmente luego de su muerte, pero en la actualidad este arte continua gozando de excelentes representantes.

El pequeño país de Sudamérica tiene la característica de contar con una población muy culta, algo que lo ha caracterizado a lo largo de la historia, lo cual ha influenciado para que los pintores uruguayos sean excelentes y en diversas etapas hayan logrado influenciar a muchas corrientes de nuevos artistas latinoamericanos fundamentalmente.
A lo largo de la historia nombres como Rafael Barradas, Juan Manuel Blanes, Enrique Castells Capurro, José Cúneo, Pedro Figari, José Gurvich, Carlos Páez Vilaró, Joaquín Torres García y Petrona Viera han sido los pintores uruguayos que han representado al país en el mundo.
Entre estas obras que puedes observar de pintores uruguayos el único contemporáneo es Carlos Páez Vilaró, quien posee su casa-museo-hotel (Casapueblo) en el balneario Punta del Este, uno de los principales de Sudamérica. Visitar ‘Casapueblo’ es una experiencia única, allí no solo estará en contacto con la pintura, todo los que rodea la vida de Páez Vilaró es arte, inclusive la construcción arquitectónica realizada por el mismo con la llamada ‘técnica del hornero’ es una inmensa obra de arte.
Manteniéndonos en Punta del Este encontramos una amplia lista de pintores uruguayos que han montado sus ateliers en esta región de Uruguay, principalmente porque es allí donde el turismo llega con mayor poder adquisitivo y con ansias de conseguir el arte de Uruguay. Una artista que se destaca en la zona es la pintora Elina Diamiani.
Elina Damiani nació en una familia de artistas y desde muy pequeña estuvo rodeada del mejor arte nacional.
Comenzó pintando muebles y tablas viejas para que recobraran vida en el anticuario de su padre (el primero de una gran cantidad que existen actualmente en Punta del Este), ‘El Rescate’.
Inmediatamente se pudo notar que contaba con un estilo único con tendencias hacia el arte naif o primitivo.
Sus obras se encuentras desperdigadas por el mundo, principalmente en Argentina, pero también se las puede encontrar en Brasil, Francia, Italia, México, Inglaterra y Estados Unidos, entre otros.
La zona de La Barra de Maldonado a escasos kilómetros es donde se conglomeran todos los artistas de mayor importancia, y justamente allí Elina Damiani es un clásico.
Su casa-atelier es visitado por turistas del mundo entero que viven momentos muy amenos con esta artista de personalidad única y alegría incomparable por su elocuencia.
Los soportes de sus obras son antiguas pizarras, puertas, tablones y maderas de gran calidad. Sobre ellos Elina plasma sus marinas, veleros, fauna autóctona e imágenes representativas de la vida de campo; utilizando la técnica del óleo y/o acrílico.