EL DEPORTE MARCIAL
DE LA MENTE
Tae: acción de pie, Kwon: acción de mano, Do: arte o camino. El Taekowon- do permite a quienes lo ejercitan, adquirir una disciplina influyente para obtener éxito en los proyectos de vida.
Tegucigalpa, 27 de sep. El arte marcial moderno del Taekowon- do de origen coreano es columna vertebral de la educación deportiva que reciben los alumnos del Instituto Central Vicente Cáceres (ICVC) desde 1984, a través del maestro Leonardo Cárcamo, quien concentra sus esfuerzos para que este deporte sea parte de la formación personal de los estudiantes.
En Honduras este deporte lo inicio Robinson Lezama (QDDG) en los años setenta, luego en la misma década llegó a Tegucigalpa desde Corea, el maestro Bong Kyong Song (QDDG), quien exportó el Taekowon- do moderno a este país centroamericano con el objetivo de entrenar a la guardia de honor y a las Fuerzas Armadas de Honduras de aquel entonces.
El profesor Leonel Cárcamo también fue alumno de este coreano y lo describe como una persona comprometida en compartir con Honduras este deporte marcial que a partir de 1976 inicio su organización.
Aunque la práctica del Taekowon- do sea de contacto, el profesor Cárcamo durante 26 años intenta que sus alumnos lo adquieran como un orden de vida, puesto que científicamente es el método para generar poder manejando la mente y el cuerpo, ya que su disciplina permite que el estudiante se concentre al máximo.
La importancia en la formación del joven en este deporte se refleja en que sus características son diferentes a los de la mayoría, que no están involucrados en la práctica de este arte marcial. Los estudios de educación física que efectuó en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Leonardo Cárcamo revelan que hasta la forma coherente de hablar de los que practican este deporte es notable, puesto que se forma un prospecto de persona diferente.
Ante las ventajas de formación de vida y resistencia física que resulta de la práctica de este deporte, los obstáculos para practicarlo en el Instituto Central Vicente Cáceres son Visibles, comenzando desde que no poseen una sede en donde los estudiantes adquieran el conocimiento que brinda este arte marcial.
En un improvisado espacio del gimnasio local del ICVC los deportistas estudian el Taekowon- do y con sus escasos accesorios para proteger su cuerpo cumplen con su rutina diaria de desarrollar este deporte cultural asiático.
Pese a las dificultades que han presentado para desarrollar este deporte, el esfuerzo personal de cada estudiante que suman alrededor de 100 alumnos practicantes de este arte marcial y el empeño del profesor Leonardo Cárcamo con el apoyo de sus amistades personales, ha logrado que esta institución estatal hayan egresado varios campeones en esta disciplina marcial.
Cárcamo describe que la falta de protectores de cabeza, pecho, de boca, de ante brazo de rodilla, genital y los escudos de pateo son algunos complementos que dificultan el entrenamiento del Taekowon- do en el ICVC.
Otro de los inconvenientes en el desarrollo de este deporte son los problemas internos que mantienen las autoridades responsables en su organización, puesto que existe una intervención desordenada de parte de sus directivos, lo que no permite el crecimiento del Taekowon- do en Honduras, imposibilitando que se condense una federación de este arte marcial moderno.
Para el profesor Cárcamo“Lo que se gasta en el futbol en un día se puede apoyar a un joven por un año en el deporte del Taekowon- do”.
En lo que va de 2010 el Instituto Central Vicente Cáceres ha sobresalido en el campeonato nacional Ingeniero Arnoldo Avilés, que participaron más de 30 escuelas de todo el país y en donde el populoso colegio ICVC logro tres medallas de oro, tres de plata y tres de bronce en la disciplina marcial del Taekowon- do, lo que confirma el esfuerzo de este equipo juvenil.
En el transcurso de los años el ICVC ha tenido la participación de más de 500 alumnos en este arte marcial en campeonatos nacionales y centroamericanos de los que se ha destacado la medallista de oro Vilma Martínez, quien gano en los quintos juegos centroamericanos de 1990.
Próximamente se espera participar en un campeonato nacional en el mes de diciembre a efectuarse en el Complejo Deportivo de la Villa Olímpica de Tegucigalpa.
En Honduras este deporte lo inicio Robinson Lezama (QDDG) en los años setenta, luego en la misma década llegó a Tegucigalpa desde Corea, el maestro Bong Kyong Song (QDDG), quien exportó el Taekowon- do moderno a este país centroamericano con el objetivo de entrenar a la guardia de honor y a las Fuerzas Armadas de Honduras de aquel entonces.
El profesor Leonel Cárcamo también fue alumno de este coreano y lo describe como una persona comprometida en compartir con Honduras este deporte marcial que a partir de 1976 inicio su organización.
Aunque la práctica del Taekowon- do sea de contacto, el profesor Cárcamo durante 26 años intenta que sus alumnos lo adquieran como un orden de vida, puesto que científicamente es el método para generar poder manejando la mente y el cuerpo, ya que su disciplina permite que el estudiante se concentre al máximo.
La importancia en la formación del joven en este deporte se refleja en que sus características son diferentes a los de la mayoría, que no están involucrados en la práctica de este arte marcial. Los estudios de educación física que efectuó en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Leonardo Cárcamo revelan que hasta la forma coherente de hablar de los que practican este deporte es notable, puesto que se forma un prospecto de persona diferente.
Ausencia Federativa
En un improvisado espacio del gimnasio local del ICVC los deportistas estudian el Taekowon- do y con sus escasos accesorios para proteger su cuerpo cumplen con su rutina diaria de desarrollar este deporte cultural asiático.
Pese a las dificultades que han presentado para desarrollar este deporte, el esfuerzo personal de cada estudiante que suman alrededor de 100 alumnos practicantes de este arte marcial y el empeño del profesor Leonardo Cárcamo con el apoyo de sus amistades personales, ha logrado que esta institución estatal hayan egresado varios campeones en esta disciplina marcial.
Cárcamo describe que la falta de protectores de cabeza, pecho, de boca, de ante brazo de rodilla, genital y los escudos de pateo son algunos complementos que dificultan el entrenamiento del Taekowon- do en el ICVC.
Otro de los inconvenientes en el desarrollo de este deporte son los problemas internos que mantienen las autoridades responsables en su organización, puesto que existe una intervención desordenada de parte de sus directivos, lo que no permite el crecimiento del Taekowon- do en Honduras, imposibilitando que se condense una federación de este arte marcial moderno.
Medallista de oro
Por tal motivo este docente comprometido con la formación de sus estudiantes pretende efectuar un proyecto de cooperación ante las instituciones empresariales para que se apoye este arte marcial, puesto que los requerimientos para con los estudiantes también se concentran en la supervisión de un médico y una dieta personal, tal y como lo exige este deporte individual que puede permitir a Honduras crecer deportivamente.Para el profesor Cárcamo“Lo que se gasta en el futbol en un día se puede apoyar a un joven por un año en el deporte del Taekowon- do”.
En lo que va de 2010 el Instituto Central Vicente Cáceres ha sobresalido en el campeonato nacional Ingeniero Arnoldo Avilés, que participaron más de 30 escuelas de todo el país y en donde el populoso colegio ICVC logro tres medallas de oro, tres de plata y tres de bronce en la disciplina marcial del Taekowon- do, lo que confirma el esfuerzo de este equipo juvenil.
En el transcurso de los años el ICVC ha tenido la participación de más de 500 alumnos en este arte marcial en campeonatos nacionales y centroamericanos de los que se ha destacado la medallista de oro Vilma Martínez, quien gano en los quintos juegos centroamericanos de 1990.
Próximamente se espera participar en un campeonato nacional en el mes de diciembre a efectuarse en el Complejo Deportivo de la Villa Olímpica de Tegucigalpa.